El periodista Miguel Ángel Granados Chapa destacó las diferencias entre los candidatos a la gubernatura de Puebla, Rafael Moreno Valle por la alianza Compromiso por Puebla y Javier López Zavala por Puebla Avanza, tanto en su trayectoria profesional, sus orígenes y los respaldos políticos que los preceden.
A través de su columna Plaza Pública, que este miércoles tituló "En Puebla, dos Méxicos", escribió lo siguiente:
Las principales fuerzas políticas en Puebla ya definieron a sus candidatos. El gobernador Mario Marín impuso a su favorito, Javier López Zavala, hecho a su lado desde hace tres lustros. Ese será el candidato del PRI. En la esquina opuesta, postulado por el PAN y apoyado por el PRD, Rafael Moreno Valle Rosas. Si éste triunfara, será el segundo gobernador de su nombre en esa entidad. Su abuelo, el doctor Rafael Moreno Valle, un cirujano ilustre, dejó en 1968 la Secretaría de Salubridad y Asistencia para ser candidato al Gobierno de Puebla. Tomó posesión el primero de febrero de 1969. No concluyó su periodo. Renunció en abril de 1972, quizá presionado por el presidente Luis Echeverría, acaso porque Moreno Valle era cercano a su doble colega -médico y miembro del Gabinete diazordacista-Emilio Martínez Manaoutou en la sucesión presidencial que favoreció a Echeverría.
Es difícil hallar dos perfiles más contrastantes, dos trayectos de vida tan alejados entre sí como los de los contendientes por la gubernatura poblana. López Zavala, como su jefe Marín Torres, trabajó toda su vida en el Gobierno y el PRI. Nacido en Pijijiapan, Chiapas, su familia emigró a Puebla donde él estudió derecho en la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla. Siendo estudiante encontró empleo en la Secretaría de Gobernación local, en tiempos del gobernador Manuel Bartlett y en 1996 llegó a ser secretario particular del titular de aquella oficina, Mario Marín, que a su turno había ascendido en la escala burocrática local. Marín lo llevó consigo, igualmente en la secretaría particular, cuando presidió el comité estatal del PRI. Y cuando en 1999 el después llamado Gober Precioso ganó la alcaldía de la capital de Puebla, López Zavala fue coordinador del DIF-municipal.
En 2000 López Zavala sufrió un tropiezo. Su jefe lo impulsó a la candidatura a una diputación federal, pero el efecto Fox se reflejó especialmente en Puebla y el marinista perdió, no sólo la elección sino la oportunidad de asomarse a la vida política más allá del estado de su adopción. Volvió al DIF y después obtuvo un mínimo resarcimiento a su percance electoral ganó una diputación local. En 2004 se encargó de coordinar la campaña que llevó a su protector al Gobierno del Estado. Marín lo hizo secretario de Gobernación y buscaba hacerlo cabeza de la Legislatura en 2007, pero el éxito de las maniobras priistas fue tal que estando a la cabeza de la planilla plurinominal no pudo volver al Congreso local por el número de sus compañeros que ganaron distritos de mayoría. Entonces Marín lo estableció en la oficina dadivosa por excelencia, la Secretaría de Desarrollo Social.
Marín se aseguró que su designio de continuar en el Gobierno a través de su protegido no sufriera alteraciones y confeccionó una convocatoria y un procedimiento a modo. Enrique Doger, ex rector de la BUAP y ex alcalde capitalino pretendió eso no obstante inscribirse en el proceso interno. No lo consiguió ni apelando a la justicia electoral y López Zavala ha comenzado ya sus recorridos como candidato priista.
El tercer Rafael Moreno Valle, Rosas de apellido materno, tiene una historia muy distinta. Su padre estudiaba en la Universidad de Columbia en Nueva York cuando su hijo fue concebido. El nacimiento, sin embargo, ocurrió en Puebla el 30 de junio de 1968, mes y medio antes de que el primer Rafael Moreno Valle dejara su cargo ministerial con Díaz Ordaz para ir de campaña a esa entidad. El ahora candidato se formó en los Estados Unidos: es licenciado en economía y ciencias políticas por el Lycoming Collage, de Williamsport, en Pennsylvania; doctor en leyes (o juris doctor, como prefiere decir) por la Universidad de Boston y con posgrado en administración de empresas por la universidad de Harvard.
Se empleó de inmediato en el sector privado, todavía en Estados Unidos. Fue subtesorero para América Latina en el Dresdner Bank y vicepresidente para América Latina de Dresdner Kleinwort Benson. Es miembro de la barra de abogados de Nueva York, "autorizado por la Suprema Corte del estado de Nueva York para litigar en cortes", según se lee en su currículo oficial. Se estableció en Puebla en 1999, cuando el gobernador Melquiades Morales lo designó secretario de Finanzas y después de Desarrollo Social. En 2003 fue diputado federal y en ese momento entró con contacto con Elba Esther Gordillo, quien lo atrajo a su círculo cercano. Siguiendo las directrices de la presidenta del sindicato magisterial, cuando ella fue defenestrada de la coordinación parlamentaria, Moreno Valle se apartó del PRI, renunció finalmente a su breve militancia y se afilió al PAN, como parte de la estrategia multipartidista de la dirigente, que además de su propio partido, el Panal, cuenta con delegaciones en otros.
En la contienda interna por la candidatura panista, Moreno Valle batió a Ana Teresa Aranda, la tenaz luchadora por la alcaldía capitalina y el Gobierno Estatal, que además ha sido diputada federal, directora del DIF nacional y subsecretaria en la secretaría de Gobernación. Dada la cercanía de la profesora Gordillo y el presidente Calderón, el ala derechista del PAN poblano se resignó al resultado, de modo que no puede anticiparse ya no digamos una escisión sino siquiera una huelga de manos caídas. Hace seis años Marín ganó por una diferencia de más de 200 mil votos, unos trece puntos de diferencia en términos relativos. Ese es el desafío que el gordillismo-panismo (y el PRD) tiene que enfrentar en Puebla.
Que te dice esta cronica?
Que aunque salio del PRI, no esta tan envenenado com Zavala, quien ha militado en este toda su vida, Moreno Valle es congruente, Zavala, solo un chupasangre....