Por primera vez, la Secretaría de Transportes (ST) reveló el único plano que la empresa OHL entregó al gobierno estatal sobre el trazo del Libramiento Norte de la ciudad de Puebla, una vía terrestre de 35 kilómetros de longitud cuya construcción está calculada en 189 millones de euros (3 mil 213 millones de pesos) y tiene una concesión de 33 años a favor de la firma española, según el contrato firmado el 24 de marzo de 2008.
Según la respuesta de la dependencia estatal a la solicitud de información 00402611, realizada por Federico Ramírez Ruíz a través del sistema electrónico Infomex, la vialidad, que tendría un aforo vehicular de 10 mil vehículos cada año, empezará a la altura de San Miguel Xoxtla y concluirá en Amozoc, por lo que en ambos puntos ofrecerá entronques con la autopista México-Veracruz.
Asimismo, la compañía planea entronques a la altura de la carretera federal Puebla-Tlaxcala, de la vía corta a Santa Ana Chiautempan y de la autopista Amozoc-Perote, además de un puente para cruzar el río Atoyac.
De acuerdo con el plano de Obrascón, Huarte y Lain (OHL), la autopista pasará por el municipio de San Pablo del Monte, Tlaxcala, y por los municipios poblanos de San Miguel Xoxtla, Cuautlancingo, Amozoc y las juntas auxiliares de San Pablo Xochimehuacán, San Sebastián de Aparicio, La Resurrección y Santa María Xonacatepec en Puebla.
Cabe recordar que en diciembre pasado, el secretario de Infraestructura, Antonio Gali Fayad, consideró que la construcción del Libramiento Norte de la ciudad de Puebla empezaría el 15 de enero de este 2012; sin embargo, el plan fracasó.
En ese entonces, el funcionario reveló que OHL ya había comprado el 90 por ciento de los terrenos previstos en el derecho de vía; además, descartó cambios en el trazo original de la vía, que tiene el objetivo de descongestionar la zona urbana y de ofrecer importantes ahorros de tiempo a los usuarios de larga distancia del corredor que une México, DF y Veracruz.
Según el reporte financiero más reciente de la compañía ibérica, en los primeros nueve meses de 2011 la empresa, a través de su filial en México, ha invertido 491 millones de pesos en la adquisición de predios y elaboración del proyecto ejecutivo.
En contra de la obra está el Frente de Pueblos por la Defensa de la Tierra y el Agua, el cual reiteró el exhorto al gobierno estatal para que devuelva los terrenos comprados a los campesinos mediante engaños.
Israel San Pedro, dirigente de la Red de los Derechos Humanos, consideró que la transacción de las tierras fue consecuencia de un acto ilegal, pues nunca recibieron información completa sobre el destino de sus bienes.
Pero no sólo esta situación inhibe el inicio de los trabajos: las firmas Moody´s y Fitch ubicaron las acciones de OHL en el segmento “bonos basura”, lo que dejó mal parada a la constructora y en vilo al proyecto local.
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