Verá, Acción Nacional no podría, no por intereses meramente electorales, traicionar el espíritu democrático que lo ha diferenciado de todas las ofertas políticas, de todas.
Nosotros lejos de ver como un desgaste el que nuestros militantes eligieran, lo supimos ver como la oportunidad de demostrar una vez más que los hombres y las mujeres que de aquí emanan, no tienen ningún empacho en debatir. Al ser el único partido que realizó este ejercicio en dos ocasiones, los encuentros llamaron la atención de propios y extraños, en twitter, en la televisión, en la prensa escrita, en la radio, todos hablaban de lo que se habían dicho Josefina, Santiago y Cordero, de lo que habían propuesto, y a nosotros nos daba mucho gusto estar en la agenda pública.
Los ojos de los mexicanos estaban puestos en el proceso panista, incluso hacían sus apuestas para ver quien competiría con Peña Nieto o AMLO, algunos, los pocos por supuesto, pero no por eso menos valiosos, llegaron a las urnas el 5 de febrero pidiendo votar por nuestros precandidatos. En el PAN, sabíamos que cualquiera que obtuviera el triunfo sería legítimo, y que saldría respaldado por toda la militancia que sólo estaba esperando a su candidato o candidata para plantarse todos unidos al lado de él o ella, y salir por las voluntades de los mexicanos. Y así fue, la democracia interna nos fortaleció, frente al desplome de nuestro principal contrincante, a quien se le olvidó que antes de julio del 2012, era muy pronto para darse por triunfador.
Según la encuestas Ipsos Bimsa, Josefina Vázquez Mota, subió nueve puntos en tres meses, mientras que Enrique Peña cayó dieciocho puntos en el mismo periodo de tiempo, lo cual me parece desastroso para el cuarto de guerra del priista porque aún no comienza la campaña y no hemos exhibido todo lo débil que es su candidato y ya ha perdido demasiado.
Según esta casa encuestadora, el esposo de la “Gaviota” cuenta con el 36 por ciento de la intención del voto, cuando llegó a tener el 54 por ciento, mientras que Josefina Vázquez Mota pasó del 15 al 24 por ciento y Andrés Manuel López Obrador alcanza el 16 por ciento.
La empresa MERCAEI por su parte, marca que Josefina registró un aumento de cuatro puntos de noviembre el año pasado a febrero de este año, pasando del 25 al 29 por ciento de la intención de voto, por su parte el candidato priista pasó de un 35 a un 34 por ciento, lo que significa que la brecha entre ambos se cerró a sólo cinco puntos porcentuales.
Como ves, el proceso interno del PAN, le permitió a Josefina Vázquez Mota, posicionarse entre los mexicanos, quienes en su mayoría hoy piensan que los cargos públicos de elección popular no son una cuestión de género -7 de cada 10 ciudadanos según Excélsior-.
Si analizamos el aumento de popularidad de Josefina en las redes sociales utilizadas en su mayoría por jóvenes, es una clara muestra que el PAN lejos de equivocarse supo capitalizar su elección interna del 5 de febrero.
Ese día, Josefina Vázquez Mota contaba con 258 mil 329 seguidores en Twitter, y la noche del domingo 12 ya eran 305 mil seguidores, lo que representó un aumento del 18 por ciento -legítimos y no bots como los del candidato del PRI-.
Otro ejemplo, Jose, tenía 918 mil 788 fans en su página de Facebook, y una semana después tenía un millón 10 mil fans, una aumento del más del 10 por ciento, mientras Peña Nieto registró en la misma página social y en el mismo tiempo únicamente un incremento del tres por ciento.
Como ves, el panorama electoral cambió totalmente de noviembre o diciembre del año pasado a febrero de este año, el PAN llega más democrático, unido y fortalecido que nunca, frente a un contrincante que va en caída libre y sin paracaídas, a este paso el candidato del PRI y la candidata del PAN muy probablemente arrancarán la contienda en igualdad de circunstancias.
Pero lejos de las encuestas, en las cuales no hay que confiarse del todo porque sólo reflejan un momento específico en la vida política en el país, y en política nada, nada está escrito, en el PAN nos sentimos muy satisfechos de haber escuchado a la militancia, de haber llamado la atención de los mexicanos y de nuestra capacidad de salir unidos. Ahora, todo nuestro tiempo, talentos y recursos están enfocados en diseñar con lupa cada paso que daremos para volver a convencer a los mexicanos. Nuestros rivales verán a un Acción Nacional que no les dará tregua y usted lector, verá una opción fresca, respetuosa, valiente, inteligente y creativa, que le va a demostrar por qué seguimos siendo la mejor oferta para dar resultados.
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